¡ Feliz, feliz 2022, sabrosones !
A que se pensaron que el blog no tendría mas entradas... se equivocaron. Seguimos sumando, molestando, provocando y embroncando. Que de eso se trata.
En esta ocasión les presento uno de mis relojitos chinitos que acaba de sacarse el tan ansiado pasaporte italiano. Y como es un influencer lo ha posteado en Facebook, Twitter, Tik Tok, Youtube, Instagram y cuanta red social se le puso a tiro. Y es que el relojito está feliz. Está tan, tan feliz que le gana en felicidad a los miles de argentinos (que rezuman inteligencia y ecuanimidad) que postean el pasaporte comunitario como si fuese un título universitario o una proeza épica. Sin acritud, chamacos. Sin acritud.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario